Nuestro primer consejo es que siempre has de preguntar a la persona que te ha tatuado. Ella sabe cómo asegurar que tu tatuaje se mantenga en las mejores condiciones posibles. Dicho esto, vamos a darte unos consejitos para que tu obra maestra se vea igual de bien que el primer día:
- Durante los primeros 7-10 días, lava tu tatuaje 3 veces al día, sécalo con papel de cocina y, después, aplica una fina capa de crema que lo mantenga hidratado pero no húmedo
- No expongas tu tatuaje recién hecho a ningún tipo de suciedad ya que se trata de una herida abierta
- Evita el agua de la piscina, el mar y el sol directo durante las primeras tres semanas tras haberte tatuado
- No uses productos no específicos para tatuaje sin haber consultado a tu tatuador o a un sanitario
Un tatuaje tarda entre una o dos semanas en curarse. Dependiendo del tipo de lugar donde te hayas tatuado, y de cómo sea el mismo, este tiempo puede alargarse o no. Ahora que ya tienes nuestras recomendaciones, mantén esa obra de arte hidratada para que siempre esté en las mejores condiciones posibles.