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Hace diez años Concordia Márquez jinete de competiciones, cuando se dirigía Malaga , se encontró a un caballo desnutrido y sin cariño.
La compasión, un sentimiento humano , se despertó en Concordia y decidió llevárselo a remolque, este acto produjo un giro inesperado y positivo en su vida.
Decidió crear la Asociación CyD Santa María junto con su hermana Virginia, para actuar en contra del maltrato de estos animales de la zona. ¿Sabías que solo el 1% de los caballos son los pocos afortunados que llegan a viejos y no son abandonados?
Actualmente, la Asociación CyD Santa María es la única entidad del país dedicada al rescate de caballos, sin subvención y financiada por las hermanas Márquez, socios del albergue, colaboradores y amigos.
En un principio, destinaban el espacio a acoger caballos hasta que estuvieran completamente rehabilitados y fueran adoptados. Posteriormente les buscaban una familia de acogida. Y el espacio lo destinaban únicamente para dar cobijo a aquellos que estuvieran en fase terminal. Pero la realidad es mucho más difícil encontrar una familia que los adopte, resultando muchas veces imposible.
Para poder sumar colaboradores, Concordia y Virginia han creado una nueva plataforma de pequeñas donaciones de 1€ al mes, gracias a la cual consiguieron recaudar más de 1500€ para estos animales y pueden continuar con su actividad de rescate.
EL VÍNCULO ENTRE UN CABALLO Y UNA MUJER MALTRATADOS
Curiosamente, muchos de los voluntarios son mujeres, también maltratadas, quienes establecen una conexión prácticamente directa con los caballos, creando un vínculo emocional muy fuerte y una empatía mutua.
A raíz de la oportunidad de trabajar con La Ciudad de los Niños. Hogar para niños y jóvenes con falta de recursos económicos y familiares hacia 1977. Se dieron cuenta que los caballos tenían una relación más especial con aquellos niños que habían sufrido problemas similares al del propio animal. Con las mujeres maltratadas ocurría lo mismo. Cuando una mujer maltratada llega al albergue, Concordia le pide a la mujer que se acerque a un caballo y le explique su historia tal y como la siente. Y ella analiza las reacciones del animal. Poco a poco éste se va acercando a la mujer hasta que le pone la cabeza en el hombro y se crea una conexión mágica que ayuda a sanar las malas experiencias de ambos.
Con esta acción, CyD Santa María consiguiò responder a dos problemas comunes en nuestra cruel sociedad actual: el maltrato hacia los animales y hacia mujeres inocentes.
Es espectacular cómo la sensibilidad y nobleza de los caballos sirven de ejemplo a humanos. Y ayudan a que muchas mujeres maltratadas se sientan entendidas y puedan salir a delante. Laura Ávila